
Los robos de motos siguen en pleno auge. Todo mercado se maneja por la oferta y la demanda. Lamentablemente hay demanda, hay compradores de motos robadas. Comprar de «buena fe», como argumentan siempre, es hacer los negocios legales; donde las transacciones son turbias, no hay «buena fe».
A la lista de víctimas, se suman nombres nuevos, como es el caso de Agostina Porcel, quien en las primeras horas del 31 de diciembre, salió de un trabajo, fue a su casa a cambiarse para ir a otro trabajo y en ese ínterin, se la robaron de la puerta de su casa. El hecho sucedió entre las 1:00 y 2:00 A.M. en la esquina de Quintana y Mitre.
Inmediatamente hizo la denuncia, pero al momento no tiene novedades.
Es una moto Energy pintada de negro, patente 793JOW