Estafadores que se dedican a aprovecharse de personas, generalmente de edad mayor e indefensas; se hicieron presentes en un domicilio de General Baldissera, ayer, en horas del mediodía.
Pese al infortunio que tuvo que vivir ésta familia, se puede decir, que el hecho se dio con una secuencia de acciones acertadas, que lograron desarticular el operativo de estafa; y finalmente luego de una arriesgada persecución civil, la policía logró aprehender a los delincuentes en flagrancia.
Con el repetido argumento y procedimiento, «el cuento del tío», que utilizan para lograr la confianza de quien intentan persuadir, para abusar de su buena fe.
En Gral. Baldissera, una mujer mayor, en silla de ruedas, Elvira Prámparo de Loza, que estaba al cuidado de una empleada, permitió el ingreso a su domicilio de dos masculinos, que simulaban ser empleados de un banco. En ese momento, oportunamente la víctima llamó a su nieto, quien la atendió y se hizo presente de inmediato. A partir de ese momento, la escena tuvo un giro rotundo y hubo un forcejeo.
El nieto de la víctima, Brian Loza, de 35 años, actuó sin pensar en las consecuencias. Los delincuentes le arrojaron una silla, con lo que le quebraron parte de la mano y emprenden la huída en un auto rojo. Pese a estar quebrado, Brian comenzó la persecución en su camioneta Toyota, todo el tiempo tocando bocina.
En la ruta, se encontraron de frente, ésto generó un impacto contra una planta, el auto hizo un trompo y se les rompió la rueda. Los delincuentes emprendieron la huída corriendo y quisieron robar una camioneta Amarok a otro vecino. Pero Brian Loza le avisó a los gritos que le estaban por robar la camioneta. Luego se metieron a la escuela secundaria y Brian rodeaba la manzana de la escuela, tocando bocina. El alboroto llamó la atención de vecinos que intervinieron y finalmente lograron la aprehensión de los dos delincuentes de 20 y 25 años.