El Senado aprobó este miércoles por unanimidad y giró a la Cámara de Diputados un proyecto de ley que establece que todos los ciudadanos mayores de edad serán donantes a menos que manifiesten su voluntad de no serlo.
En el marco del Día Nacional de la Donación de Órganos, la llamada «Ley Justina», en homenaje a la niña de 12 años que falleció el año pasado por no recibir un trasplante de corazón a tiempo, fue aprobada con 68 votos y enviada a la Cámara baja para su sanción definitiva.
El proyecto modifica la actual Ley 24.193 de trasplante de órganos, de manera que toda persona mayor de 18 años será considerada donante a menos que manifieste voluntad en contrario, lo que implica que tampoco serán los familiares de alguien fallecido los encargados de autorizar la donación.
«Podrá realizarse la ablación de órganos y/o tejidos a toda persona mayor de 18 años que no haya dejado constancia expresa de oposición a que después de su muerte se realice la extracción de los mismos», señala el proyecto.
La iniciativa también impondrá la obligación a los profesionales médicos de notificar al INCUCAI los tratamientos de diálisis que le realicen a un paciente, o cuando le indiquen la realización de un trasplante.
También establece que para asegurar la calidad de todo lo relativo a donación y trasplante, se deberá destinar como mínimo un 20% de los recursos del Fondo Solidario de Trasplantes a capacitación.