La semana pasada se hicieron los exámenes de fin de colegio secundario en Argelia, y se bloqueó la conexión a Internet para evitar que los estudiantes se pasaran preguntas y respuestas.
Ni conexión fija, ni celular. Para nadie y en todo un país. Apagón para que no ocurra lo que parece haberse convertido ya en un hábito entre los estudiantes de secundaria: hacer trampa.
Esta es la medida extrema que tomó el gobierno de Argelia para no poner en riesgo la validez de uno de los exámenes más importantes que se pueden realizar en el sistema educativo del país.
Entre los días 20 y 25 de junio internet se suspendió entre una y tres horas diarias, una vez que dieron comienzo las pruebas de fin de bachillerato que se realizan en todo el país africano.