En comunicación telefónica con Graciela Escobar, nos cuenta del robo sufrido en las primeras horas de hoy en su kiosco.
Siendo alrededor de las 04:20 horas me llama mi hermana que habían entrado a robar en el kiosquito que tiene en el frente de la casa en calle Zeballos y San Lorenzo.
Aparentemente le patearon la puerta y entraron, llevándose la caja registradora y un poco de bebidas.
Increíblemente 40 minutos más tarde volvieron a ingresar, eran 4 chicos jóvenes, le pegue el grito y salieron corriendo, y a mitad de cuadra se frenaron y me empezaron a increpar e invitándome a pelear.
Yo le pedí a la policía que ponga cámara o haga algo, que refuerce la presencia policial porque esto es tierra de nadie.
“Que mas tenemos que esperar, que nos maten por unos mangos”