Durante el día martes podíamos ver en distintos puntos de la ciudad a la Policía Ambiental y a Gendarmería Nacional que estaban realizando allanamientos en viviendas en las que detectaron tenencia de fauna silvestre. Las inspecciones se realizaron luego de meses de investigación y seguimiento.
Personal de Policía Ambiental y de Gendarmería Nacional allanaron siete domicilios particulares en la localidad de Marcos Juárez y secuestraron más de 200 ejemplares de fauna silvestre en cautiverio. Estos procedimientos se dan en el marco de una extensa investigación llevada a cabo por la repartición del Ministerio de Coordinación durante seis meses, luego de recibir una denuncia anónima que alertaba de la situación.
Los agentes solicitaron las órdenes de allanamientos en la Fiscalía Federal de Bell Ville para ingresar a cada domicilio señalado. Las siete inspecciones se realizaron en simultáneo y se hallaron mayormente aves silvestres, pero también 14 tortugas terrestres y acuáticas.
En la propiedad en la que mayor cantidad de ejemplares se secuestraron había 80 pájaros en diferentes jaulas. La importancia del procedimiento efectuado no solo radica en la gran cantidad de animales hallados, sino en que se pudo recuperar del cautiverio a ejemplares cuyo estado de conservación es vulnerable.
“Es muy importante que la comunidad entienda que los animales de fauna silvestre no son mascotas que podemos tener en nuestra casa porque necesitan vivir en libertad, en su hábitat y además pueden causarnos alguna enfermedad”, explicó Adrián Rinaudo, director de Policía Ambiental. Algunas de las especies recuperadas fueron: corbatitas, loros habladores, cardenales, semilleros, cabecita negra, jilgueros, reinamoras, verdón, cotorrras, tortugas terrestres y acuáticas, entre otras. Todos los animales fueron trasladados al centro de rescate y rehabilitación Tatú Carreta, en la localidad de Casa Grande, para que determine su estado sanitario.
Al finalizar los procedimientos se labraron las actuaciones correspondientes por infringir la normativa vigente y se secuestraron jaulas y tramperos. Además, la Fiscalía de Bell Ville determinó el secuestro de teléfonos celulares, y siete personas quedaron demoradas.