«Yo me drogué, probé todas las drogas. Al principio estuvieron buenísimas y después te destruyen, destruyen tus vínculos, tu familia, todo», admitió el músico.
La honestidad y verborragia de Chano Charpentier (34) mantienen al artista siempre al tope de las prioridades de la prensa, más aún luego de que Juana Viale (34) hablara de sus allegados adictos a las drogas en Almorzando con Mirtha Legrand, y algunos especularan que se refería a él. En una nota con Informadísimos en plena medianoche por el barrio de Palermo, el líder de Tan Biónica se refirió sin pelos en la lengua respecto de su ex pareja y su lucha contra las adicciones Consultado por su opinión respecto de la fiesta Time Warp, donde hubo cinco muertos por sobredosis de drogas de diseño, el cantante dijo: «Yo creo que hay que legalizar todas las drogas. Creo que las personas son adictas, no hay sustancias adictivas, que la adicción es una condición natural. El adicto de por sí tiene una disposición de desafío», dijo. Como en el momento en que lo entrevistaban Chano conversaba por teléfono con su psicólogo, contradijo al especialista en cuanto al progreso en la rehabilitación por sus adicciones: «¿Cómo que ‘estamos en eso’? Estoy limpio», subrayó. En ese contexto, la periodista le comentó sobre las afirmaciones de Juana en Almorzando con Mirtha Legrand, donde la actriz dijo: «Yo conozco (adictos). Conocí una persona así. Es difícil salir. Es difícil la cabeza del adicto también».Chano respondió: «¿Creen que se refirió a mí? Yo creo que Juana conoce a un montón de adictos, con lo divina que es y lo hermosa que es Juana. Ella no me ayudó en este proceso. Me ayudó en otras cosas, pero en este proceso, no», señaló. Acto seguido, intentó despegarse: «No está bueno hablar de Juana. Terminamos bárbaro. Un besito, Juanita, te quiero, eh. Te extraño. Hablo siempre con Juana, la extraño a ella, a su hijo». Luego, Chano se plantó firme y confesó: «Yo tengo un mensaje, de hecho hice un reality y vino mi terapeuta. Una de las cosas que hablamos honestamente en la sesión, y él puede dar fe, es que esto también es pasar el mensaje. Yo me drogué, probé todas las drogas. Al principio estuvieron buenísimas y después te destruyen, destruyen tus vínculos, tu familia, todo. No es una cosa moral lo que digo, es una experiencia propia. El desafío es estar limpio». Luego, agregó: «La primera vez te pega bien, te divertís y la pasás bárbaro, espectacular. Éxtasis, cocaína, lo que quieras, y después te pega mal». Más tarde, también reflexionó respecto de los dichos de Úrsula Vargues, quien aseguró que probó éxtasis, se divirtió y lo volvería a hacer: «Tal vez esa persona no es adicta. El éxtasis lo que hace es que los pibes van y se toman una pastilla el fin de semana, y después te genera una depresión durante toda la semana, donde estás esperando ese momento. Y empezás a repetirlo. Después, el cuerpo empieza a asimilar la sustancia, y una pastilla no te pega, te tomás dos, después tres, después le sumás ketamina, popper, y decís ‘nunca voy a tomar cocaína…’. Creo que no hay que ser tan drástico. Desde los 24 años que lucho contra mis adicciones», admitió.