Luego de conocerse el caso respecto al incendio de una de las viviendas del PROMUVI como consecuencia de una posible pérdida de gas; y de la palabra de la Arq. Marisa Machado, jefa de arquitectos, dialogamos con la damnificada Flavia Veiga, propietaria de la vivienda ubicada en calle Cura Brochero al 600.
Estoy en esta vivienda desde el mes de Octubre del año 2018 y esa misma semana me dijeron que iban a venir a arreglar los detalles que habían quedado.
La vivienda tiene muchos detalles y todavía no fueron a arreglarlos. Uno de los más importantes era la filtración de agua. Yo solo pretendía el arreglo del techo, pero tambièn hay puertas mal colocadas y hay varios detalles.
Yo soy empleada, pedí días de vacaciones y la gente no iba a trabajar.
En febrero tuvimos una reunión con Guillermo Cornaglia y siempre nos dice que no tiene idea lo que es un “ladrillo” y presentamos una nota por escrito con todos los reclamos.
Antes del incendio que fue el 28, Marisa Machado me envió un audio donde decía que iban a ir a terminar mi casa.
A eso de las ocho y media de la noche del viernes 28 llego a mi casa con mi hija de tres años y como tengo gas envasado, y siempre siento olor a gas, tengo mucho cuidado y abro y cierro la garrafa cada vez que usamos el calefón.
Abro la garrafa para ir a bañarme y no salía agua caliente porque tengo un calefón donde las válvulas de seguridad funcionan de acuerdo si hay mucho gas o no.
Regreso a la cocina y enciendo la hornalla de la cocina y ahí me sale la llama y una presión de la manija de la llave de paso del gas que estaba al lado de la cocina. Intento cerrar la llave y ahí sale más presión y se produce el incendio.
Yo tenía la nena en la habitación. La saco a mi nena y comienzo a llamar y gritar a los vecinos que llamaron a los bomberos, pero luego lo cancelamos porque pudimos controlar el fuego.
Uno de los vecinos cerro el tubo de gas y el fuego se calmó y ahí comenzaron a apagar las llamas con agua.
Del PROMUVI no vino nadie. Llamè al arquitecto que estaba de viaje y me dijo que se iba a comunicar con Marisa Machado.
Mi marido lo llama a Cornaglia, quien le dijo que estaba en una reunión familiar y no se podía presentar y tampoco pudo llamar a nadie.
Nosotros no queríamos tocar nada y no sabíamos como actuar.
No sabemos como sigue la historia. El día sábado, después del incendio Marisa Machado fue con un gasista matriculado y una escribana y se corroboran las tres pérdidas.
El día miércoles asistieron con un electricista y escribana donde se constata que no habia ninguna sobrecarga eléctrica y el último mensaje que tuve de la Arquitecta Machado fue el 4 de Julio donde me dice que el caso paso a Asesoría Letrada.
Ellos dejaron todo roto como estaba, rompieron azulejos, me dejaron un calefactor desarmado y tuve que conectar por mi cuenta el lavarropas y calefón.
El gasista matriculado que hizo el informe y verificaciones nos conectó los artefactos. La cocina no la tengo conectada todavía porque ese lugar esta todo roto.
Desde el 4 de Julio nadie màs me llamó, porque dicen que hay que esperar que se expida Asesoría Letrada.
El calefactor no se usaba y estaba cerrado y el otro calefactor no estaba instalado.
Según lo que dijo el gasista que fue, estaba todo sellado y mal pegado. Incluso esta persona le pidió a Laura, que es la arquitecta de la empresa Fox que le alcanzara el pegamento que corresponde y nunca se lo trajo y el chico usó el suyo que es el que corresponde, porque estaba todo sellado con otro pegamento que no es el reglamentario.
Yo tengo un susto terrible, después de todo esto.
En este lugar no hay gas natural y en la cuadra hubo tres perdidas de gas. En un caso hubo un principio de incendio que no fue tan grande como el mio, porque el propietario cerró el tubo de gas y yo no la cerré inmediatamente sino que salí con mi hija hacia afuera.
El vecino del frente hizo revisar las llaves de gas y tenia perdidas de gas por todos lados.
Yo exigí que hagan un control bien hecho. Acá la firma en teoría es de un matriculado de Córdoba, y yo no creo que haya venido a controlar cada una de las viviendas. Me parece que acà hay algo raro y que se estàn “lavando las manos”. No quiero màs que la empresa estè adentro de mi casa, porque los tuve durante muchos días y semanas y no me solucionan nada.
El día 5 me debitaron los 9.300 pesos de la cuota.
“Acá hubo tres perdidas de gas y podría haber sido una tragedia”. Concluyó la damnificada.