Jorge Orellano y una entrevista exclusiva con PANORAMA luego de su sobreseimiento en la causa Mariela Bortot, quedando libre de culpa y cargo.
Tomé este fallo con mucha paz, tranquilidad porque estaba con mi verdad, honestidad e inocencia y la Justicia llegó después de un poco más de tres años.
Mis defensores me llamaron para comunicarme esta novedad y largue en llanto luego de haber sufrido tanto tiempo por una causa tan injusta y lamentable, ya que estuve preso seis meses siempre en Bower.
Fueron seis meses de llorar y de oraciones.
Ante la opinión de Nelvio Barovero respecto a que la investigación fue mala y que fue víctima de la necesidad política de encontrar un culpable, Orellano manifestó que- efectivamente creo que acá se unió mucho lo policial, parte de la Justicia y parte de lo político.
Hubo fallos enormes de la Justicia, lo que llegó a oídos míos estando detenido en Bower luego de dos meses. El 11 de Abril llamo a mi casa y el 8 y 10 de Abril hicieron un allanamiento en mi casa secuestrando todos mis calzados y los de mi hijo.
Ante la consulta respecto a si recibió disculpas de parte de la comunidad de Inriville, ya que hubo manifestaciones y ensañamiento en su contra -Orellano dijo No. Se han acercada a la familia, a la casa de mi madre y hermanas, pero nos causaron mucho daño.
Mi vida cambió mucho. Hoy estoy más suelto y tranquilo ya que con esto termina todo, pero pienso que fue aberrante lo que me hicieron ya que quedé con secuelas piscológicas graves por las cuales todavía estoy en tratamiento.
Mi hija actualmente tiene 19 años, y cuando tenía 15 años y el comisario general Casteló el primero que me toma la declaración, jefe de las Departamentales de la Regional Sur me dijo vos tenés una hija de 15 años que se llama Ludmila y le dije si señor, pero le pregunté a que venía todo esto ya que no tenia idea porque estaba ahí y me dijo que la iba a encontrar con el c— roto y muerta a tiros. Esta persona estaba en la policía de Inriville.
Cuando me dijo esto me desangré llorando y sentí una tristeza enorme y no podía calmarme.
El general Casteló luego me dijo que venís a colaborar vos que hace 10 años te fuiste de la policía y yo respondí –están mandando dos policías comunes con 30 niños a buscar un cuerpo que no se sabía si estaba desaparecida o que había pasado. Cuando los policías se sentaban porque se cansaban y los chicos les comentaban a los papás estas situaciones. Que hubiese pasado si una criatura por esas casualidades encontraba un cuerpo. Yo opinaba si Córdoba está tan sofisticada en tema investigaciones porque no traen perros de rastreo, helicópteros, gente de rastreo especializada.