Parece un titulo inadecuado, relacionado con estadísticas que niegan esto, en una pequeña Ciudad donde no pasa nada.
Sin embargo comienzan a florecer cosas indeseables, que una familia se atreve a denunciar públicamente, la policía envía infantes que se estacionan en las cercanías.
El día viernes por la noche la casa de esta familia fue “escrachada” por un grupo que se iba renovando y permaneció durante horas frente a la vivienda.
Los infantes “fieles” a la consigna no se movieron del lugar asignado y nunca hicieron nada hasta que se llamó al comando y fue hasta el lugar.
Marcos Juárez no merece semejante situación, y esto ocurre porque basados en las estadísticas todo el mundo dice aquí “no pasa nada”; sin embargo pasa y es hora que la Justicia sepa que hay en las inmediaciones casas usurpadas, que es el germen de la droga. Es hora que la policía tenga presencia, pero de verdad, no con figuras “estáticas” que son un símbolo de presencia inactiva.
Consultadas fuentes policiales intermedias, manifiestan malestar con los altos mandos, que no dan directivas, no hay contacto con la tropa, todo el mundo está aletargado y lo que parece y en realidad puede serlo: un jardín, lamentablemente está incubando un escenario peligroso en ese y otros lugares de la Ciudad.
El legislador no sabe mayormente nada de Marcos Juàrez y viene a este lugar para los actos de protocolo, total en Marcos Juàrez “nunca pasa nada”.
El gobierno de la Provincia hizo mucho en esta Ciudad está altamente reconocido, pero hay funcionarios políticos y otros de carrera que lo están haciendo quedar mal y las elecciones son dentro de poco.
Nelvio Barovero.-