Tras los incidentes, a San Martín se le dio por perdido el partido con Villa Argentina y se le descontaron tres puntos.
El gerente del Club San Martín, Damián Di Yenno, dijo a TELE RED que ésta situación los dejó amargados, por el retroceso que significa.
Aquí la nota y a continuación una opinión del periodista Nelvio Barovero.
Opinión
Este fallo que es justo, pone de manifiesto el riesgo que significa dejar crecer sectores de «rara» adhesión institucional, que dejan hoy conocer modos de convivencia, que se toleraron y tal vez alentaron.-
No sorprende que en su descargo, el Club San Martín reconozca que esos «hinchas» le reclamaban dinero y hasta llegó a pedirse un «sueldo», y ésto sucede porque desde hace bastante tiempo se conoce que todo ésto se toleró y se demuestra por sí mismo, ya que nadie llega como «paracaidista» y se planta ante la dirigencia solicitando dinero y hasta un «sueldo» para no hacer lo que finalmente hicieron, pero con muchos antecedentes que nunca se denunciaron como delito, que en la realidad no dejan de serlo.-
Ha llegado la hora que dirigentes y autoridades policiales y judiciales «corten» este sistema, tienen una ley del deporte, que es nada más que aplicarla, y frenar ésto que amenazó un traslado político en el caso del básquetbol y que felizmente fue neutralizado.-
Marcos Juárez no da para «barras bravas» y si no alcanza la policía local, según explica la gente de San Martín en su defensa, pues que se convoque a la Guardia de Infantería sorpresivamente, un par de jornadas y seguramente se «limpiará» los escenarios del fútbol.-